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El Testigo Fiel
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«Mira que estoy a la puerta y llamo,
si alguno oye mi voz y me abre la puerta,
entraré en su casa y cenaré con él, y él conmigo...»
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Oración: Lecturas de la misa
Jueves 14 de noviembre: Año litúrgico 2023 ~ 2024

Tiempo Ordinario ~ Ciclo B ~ Año Par
Hoy celebramos:
Jueves, XXXII semana del Tiempo Ordinario, feria
Flm 7-20: Recíbelo, no como esclavo, sino como hermano querido.
Sal 145,7.8-9a.9bc-10: Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob.
Lc 17,20-25: El Reino de Dios está dentro de vosotros.
Traducción de las lecturas de Misa: Alonso Schökel y eq. - escoger oficial CEE (España)
Independientemente de la traducción escogida, si la referencia de la lectura aparece en rojo, el texto está en la traducción del P. Alonso Schökel, que es la única que está completa en la base de datos.
Flm 7-20: Recíbelo, no como esclavo, sino como hermano querido.
Querido hermano:
Me alegró y animó mucho tu caridad, hermano,
porque tú has aliviado los sufrimientos del pueblo santo.
Por eso, aunque como cristiano tengo plena libertad
para indicarte lo que conviene hacer,
prefiero rogártelo apelando a tu caridad,
yo, Pablo, anciano y prisionero por Cristo Jesús.
Te recomiendo a Onésimo, mi hijo,
a quien he engendrado en la prisión,
que antes era tan inútil para ti,
y ahora en cambio es tan útil para ti y para mí;
te lo envío como algo de mis entrañas.
Me hubiera gustado retenerlo junto a mí,
para que me sirviera en tu lugar
en esta prisión que sufro por el Evangelio;
pero no he querido retenerlo sin contar contigo:
así me harás este favor no a la fuerza, sino con toda libertad.
Quizá se apartó de ti
para que le recobres ahora para siempre;
y no como esclavo, sino mucho mejor:
como hermano querido.
Si yo lo quiero tanto,
cuánto más lo has de querer tú,
como hombre y como cristiano.
Si me consideras compañero tuyo,
recíbelo a él como a mí mismo.
Si en algo te ha perjudicado y te debe algo,
ponlo en mi cuenta:
yo, Pablo, te firmo el pagaré de mi puño y letra,
para no hablar de que tú me debes tu propia persona.
Por Dios, hermano, a ver si me das esta satisfacción;
alivia mi ansiedad, por amor a Cristo.
Sal 145,7.8-9a.9bc-10: Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob.
Él mantiene su fidelidad perpetuamente,
hace justicia a los oprimidos,
da pan a los hambrientos.
El Señor liberta a los cautivos.

El Señor abre los ojos al ciego,
el Señor endereza a los que ya se doblan,
el Señor ama a los justos,
el Señor guarda a los peregrinos.

Sustenta al huérfano y a la viuda
y trastorna el camino de los malvados.
El Señor reina eternamente,
tu Dios, Sión, de edad en edad.
Lc 17,20-25: El Reino de Dios está dentro de vosotros.
En aquel tiempo, a unos fariseos que le preguntaban cuándo iba a llegar el reino de Dios, Jesús les contestó:
–El reino de Dios no vendrá espectacularmente, ni anunciarán que está aquí o está allí; porque mirad, el reino de Dios está dentro de vosotros.
Dijo a sus discípulos:
–Llegará un tiempo en que desearéis vivir un día con el Hijo del Hombre, y no podréis.
Si os dicen que está aquí o está allí, no os vayáis detrás.
Como el fulgor del relámpago brilla de un horizonte a otro, así será el Hijo del Hombre en su día.
Pero antes tiene que padecer mucho y ser reprobado por esta generación.
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