En su sitio web, el Patriarcado Latino informó que “junto con la Letanía de los Santos cantada en árabe, los fieles siguieron a la Cruz de Cristo, durante una procesión alrededor del convento, antes de reunirse en la Puerta Santa, aún cerrada y decorada por ramas de olivo”.
“El Patriarca golpeó con un martillo tres veces, anunciando así la apertura de las puertas de la Basílica de Getsemaní, al oír las palabras del Salmo 89 ‘por siempre cantaré de las misericordias del Señor’, interpretada por el coro”, relató.
En su homilía, Su Beatitud recordó que la Iglesia en Jerusalén nació de alguna manera en la tarde del Jueves Santo, en el momento de la agonía de Cristo, “pidiendo ser la Iglesia de la Misericordia”.
En ese sentido, exhortó a los fieles a hacer de este año una ocasión de conversión y de imploración para traer “más misericordia, más justicia, más paz” en Tierra Santa, desgarrada por la violencia.
La Puerta Santa fue atravesada por el Patriarca; el Nuncio Apostólico, Mons. Giuseppe Lazzarotto; Mons. William Shomali; Mons. Giacinto-Boulos Marcuzzo; Mons. Kamal Bathish; el Custodio de Tierra Santa, P. Pierbattista Pizzaballa; así como por sacerdotes y fieles.
“Cada uno tomó el tiempo para venerar con devoción la Cruz colocada en la entrada de la Basílica”, indicó el Patriarcado.