ADRID, 29 Ago. 05 (ACI).- El Obispo de Bilbao y Presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Mons. Ricardo Blázquez, aseguró que la Iglesia está dispuesta a dialogar con el Gobierno acerca de la reforma educativa planteada en el proyecto Ley Orgánica de Educación (LOE).
"La Iglesia ciertamente está dispuesta a dialogar con el Gobierno en todas las cuestiones, también, por supuesto, en esta. Una prueba de que está dispuesta a dialogar es que unas cuantas semanas antes se había creado una comisión mixta para tratar todos los aspectos referentes a la cuestión de la enseñanza", afirmó Mons. Blázquez.
En declaraciones a Radio 5, el presidente de la CEE dijo que el aplazamiento por parte de los obispos de la última reunión de la comisión mixta fijada para el pasado 22 de julio, fecha en la que el Consejo de Ministros aprobó ?sorpresivamente y sin haber discutido con el órgano episcopal? el proyecto de Ley Orgánica de Educación, "no supuso una supresión de las negociaciones".
Las declaraciones del Obispo suceden a las publicadas por el ABC de Madrid del secretario general de Educación del Gobierno, Alejandro Tiana, en las que responsabilizaba al Episcopado de ser el responsable del cese de las conversaciones sobre la reforma educativa.
Mons. Blázquez manifestó su confianza en que "se produzcan los cambios" con "acuerdos razonables, defendiendo ese principio fundamental de la Constitución, que también está presente en el acuerdo relacionado con la enseñanza entre la Santa Sede y el Estado".
El presidente de la CEE, se mostró confiado en que durante el trámite parlamentario para la aprobación del proyecto de Ley "se introduzcan los cambios", con el fin de que la ley "satisfaga más a todos".
Según detalló el Prelado, la intención del Episcopado es "defender siempre los derechos fundamentales de los padres y contribuir al bien de la sociedad", ya que éstos "tienen el derecho a que sus hijos sean educados en las convicciones religiosas y morales de sus padres".
El proyecto de Ley de la LOE determina que la clase de Religión sea de oferta obligada en los centros y elección voluntaria para los alumnos, y que no tenga valor alguno para computar como nota en el acceso a becas y a la universidad. La CEE cree que la asignatura queda así devaluada.