ADRID, 14 Feb. 07 / (ACI).- Para desbaratar la "estrategia proselitista camaleónica" de las sectas que disfrazan u ocultan su real identidad asimilándose a la religión católica, el Arzobispado de Burgos prohibió que los locales de instituciones de la Iglesia sean cedidas a estos grupos para realizar sus actividades.
En un comunicado de la Vicaría de Pastoral, la arquidiócesis denuncia el proselitismo "malo" y "fanático" de las sectas "que recurre al camaleonismo táctico que amortigua su propia identidad para asimilarse a la religión mayoritaria en cada lugar, el catolicismo en España". Así, continúa la nota, "las sectas encuentran inicialmente menos resistencia. Una vez ganado el corazón de alguien, sus ‘razones’ obnubilarán las de la ‘razón" y será más fácil convertirlo en adepto".
El Arzobispado advierte que "uno de los recursos de esta estrategia proselitista camaleónica es el uso de locales católicos (colegios, casas diocesanas o de religiosos y religiosas de ejercicios espirituales, etc.) para que las sectas celebren sus conferencias, semanas de retiro o de convivencia, etc.".
"Se ha hecho y sigue haciéndose a pesar de ser una manipulación manifiesta encaminada a vencer la resistencia inicial de los posibles asistentes y sobre todo -si son menores de edad- la de sus padres o tutores. Estos corren el riesgo de concluir que su contenido es compatible con la fe y moral cristianas simplemente del local donde se tienen", explica.
Por este motivo, el Arzobispado burgalés comunica que "no se cederán locales de edificios diocesanos ni de Órdenes, Congregaciones, Institutos y movimientos eclesiales a sectas, sean o no de Nueva Era, ni a los llamados Movimientos del Potencial Humano. Entre estos Meditación trascendental, yoga, zen, Taichi (chuan), Rei-ki, Dianética, Energía Humana y Universal, Método Silva de Control Mental, Tensegridad, Asociación Latinoamericana de Desarrollo Humano, Forum (antes EST), Sahaja Yoga, etc.".
Asimismo señala que "si no se tiene conocimiento seguro de la naturaleza de la institución" que solicita los locales, "se procurará precisar los datos esenciales (ideología, objetivos, dirección postal, telefónica y electrónica de sus sedes más próximas, también de la central, etc.), que permitan su identificación y se consultará a esta vicaría".
Por último, indica que "aunque se haya dado la autorización, si los organizadores no son muy conocidos, asistirá a las sesiones alguien capaz de discernir ya personalmente, ya mediante la oportuna consulta".