MOSCU, 27 Feb. 08 / 05:58 pm (ACI).- El Patriarcado ortodoxo de Moscú, que ha rechazado toda actividad caritativa y evangelizadora de la Iglesia católica como "proselitismo desleal", estaría dispuesta a dialogar sobre su visión de "control territorial" sobre Rusia.
Según informa la agencia rusa Interfax, el Obispo Ortodoxo Alfeyev Hilarion, representante de la iglesia Ortodoxa rusa ante las instituciones europeas y residente en Viena (Austria), el concepto de "territorio canónico" podría ser puesto en discusión con el Vaticano.
La iglesia Ortodoxa rusa reclama que todas las naciones que formaron parte de la antigua Unión Soviética forman parte de su "territorio canónico", y que por tanto cualquier acción evangelizadora de la Iglesia católica en esas tierras es un acto de "invasión" y de "proselitismo". Esta creencia ortodoxa es el principal obstáculo en el diálogo de la Iglesia con el patriarcado ortodoxo ruso, y fue la razón que adujo el Patriarca Alexis II de Moscú para bloquear el deseo del Papa Juan Pablo II de visitar Rusia.
Las tensiones se incrementaron aún más cuando la Santa Sede decidió crear cuatro diócesis en territorio ruso el 2002.
En sus declaraciones a Interfax, el Obispo Hilarion, uno de los más autorizados voceros de la iglesia Ortodoxa, señaló que el estatus de las diócesis en "tierras ortodoxas", así como el de las diócesis ortodoxas en territorios de mayoría católica requiere "discusiones serias y elaboradas" en el marco del diálogo católico-ortodoxo.
Hilarión reconoció que "Muchas personas de occidente piensan que el concepto de 'territorio canónico' ha perdido completamente su sentido en la realidad actual, porque los creyentes ortodoxos coexisten junto a los católicos, protestantes y representantes de otras denominaciones".
Esta es la primera vez que un líder ortodoxo de alto nivel abre la puerta a la posibilidad de revisar el concepto de "territorio canónico".
La nota de Interfax menciona que el Cardenal Walter Kasper, Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, "llamó a la iglesia Ortodoxa rusa a mostrar la misma apertura que los católicos están mostrando en relación a las parroquias ortodoxas en Europa occidental y los Estados Unidos".