Señor, Rabboni y Maestro:
Cada día, cada noche, llamas a nuestra puerta
para despertarnos a la realidad del Dios vivo.
Pero al vernos preocupados, y hasta obsesionados,
por eso que llamamos necesidades básicas
- la comida, el vestido, la salud, el trabajo...-,
te sorprende nuestro agobio, y nos hablas del Padre
con un lenguaje y un tono que rompe nuestro esquemas de vida.
“Él se ocupa de los pájaros y los alimenta.
Y viste a las flores del campo de belleza...
Él sabe vuestras necesidades siempre.
Para Él valéis mucho más que pájaros y flores,
conque no andéis agobiados por la vida.
Buscad primero que reine su justicia...”
...//...
Él se ocupa de lo que nos preocupa
y quiere que nos ocupemos de lo que le preocupa.
Singular trueque, sólo comprensible
desde la pobreza e insatisfacción que arrastramos
y el amor que de ti recibimos gratis!
A Dios Hijo, Jesucristo