OMA, 17 Nov. 06 (ACI).- “Cruzada de caridad: El empeño de Pío XII por los prisioneros de la Segunda Guerra Mundial”, es el nuevo libro de una religiosa estadounidense que destaca la inmensa labor que el Papa Pacelli realizó para defender, atender, apoyar y rescatar a miles de judíos y católicos perseguidos por el régimen nazi.
La autora es Sor Margarita Marchione. El libro ha sido editado por Sperling & Kupfer y se basa en las cartas encontradas en los archivos secretos del Vaticano.
La escritora señala que quienes afirman que Pío XII no hizo nada por los judíos “no han estudiado bien la historia y no han estudiado los documentos. Yo, por mi cuenta y durante diez años, he tratado de referirme siempre a documentos –que sí existen– y por eso digo que quienes afirman lo contrario, de hecho no tienen razón”.
“Durante la guerra eran miles y miles de soldados los prisioneros y muchos también los dispersados. Las pobres familias no sabían a que atenerse. Cuando veían que nadie les prestaba atención, volvían los ojos al Santo Padre Pío XII”, comenta Sor Margarita y subraya que “dentro del archivo secreto hay unas 20 millones de cartas en las que se pide ayuda. El Santo Padre, a través de sus delegados en todo el mundo, logró contestarlas todas”.
“Con las cartas –prosigue la religiosa– he podido saber que el Papa pudo rescatar a muchos prisioneros. Es una cosa magnífica, que pocas personas conocen, porque nunca nadie ha publicado estas cartas”.
Según la autora, muchas de estas misivas tienen un contenido realmente conmovedor, y muestran que quienes escribían al Papa Pacelli “verdaderamente lo amaban. De sus cartas se percibe la fe que le tenían. En las de respuesta se pueden ver algunas anotaciones del Papa indicando qué hacer; mientras que en algunas de respuesta hay cosas como ‘gracias por el vestido que me ha mandado para mis hijos’ o de repente alguna que agradece por el dinero enviado por Pío XII“
Finalmente, la autora comentó que con frecuencia recibe cartas de personas en todo el mundo en donde le expresan su esperanza de ver pronto canonizado a Pío XII.